Lo primero, darte las gracias por todo lo que hiciste por mí y todo lo que me ayudaste, eso no se me va a olvidar nunca!! Después de mucho esfuerzo y educando la mente, como me enseñaste, me han dado el alta completa, primero me quitaron totalmente la medicación y después, la psiquiatra me dijo que ya no tenía que ir más… de verdad que de alegría también se llora!”